John Frusciante

Una ley reguló

Defender y asesorar

Al presunto asesino

Que el país quiere colgar.

 

Pasea ojos impermeables.

(Dicen que tiene treinta y seis.)

Algo de mí pensaba en

Su voluntad de rezar.

 

Vivir o no o encerrado.

Ponerle un precio a matar.

Desde aquel ochenta y nueve

La primavera Murió.

Inocente soñaba

Tocar sus ganas de confesar.

 

Le aprieta la rabia,

La constante de quitar.

No sabe de recibir,

Esa inefable lucidez.

 

Va legalmente colgado.

Como sectario encantador.

Las paredes hablaron.

La primavera murió.

Que inocente!

Soñaba tocar sus ganas de no matar.

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